La historia que hoy compartimos trae de cabeza a gran
cantidad de personas en el museo de Manchester y por todo el mundo. Se trata un
hecho que a todas luces parece imposible pero que nadie ha podido explicar.
Hablamos del extraño movimiento que tiene la estatua de Nebsenu.
La estatua en concreto, es una estatuilla de poco más de 25
centímetros encontrada en la tumba de una momia de hace 1800 años y representa
una ofrenda al dios Osiris. Pero lo misterioso de la historia es que parece que
se mueve.
En un principio el personal del propio museo creyeron que se
trataba de alguien que la movía, pero pronto se descartó la idea, ya que la
reliquia se encuentra en el interior de una urna para protegerla del exterior. Analizando
los videos de seguridad pudieron comprobar cómo durante todo el día, la estatua
realiza un movimiento circular perfecto de 180 grados.
Otra explicación que algunos científicos quisieron aportar al asunto fue que la
vibración producida por los propios visitantes del museo era la que provocaba
el movimiento de la escultura. Teoría que pronto fue descartada, ya que en caso
de que así fuera, sería casi imposible que repitiera giros perfectos de 180
grados cada día.
Sin saber cómo explicar este hecho, hay quien afirma que la
solución está en entender a los antiguos egipcios y sus energías, ya que éstos
afirmaban que en caso de que una momia fuese destruida, los objetos que se
encontrasen junto a ella podrían ser recibidores de la energía de la persona
muerta.
El misterio sigue latente, y muchos han sido los que han
querido resolver tal misterio. Pero es sólo durante el día cuando la estatua se
mueve, durante la noche permanece quieta. Así lo demuestran las horas de grabación
y los análisis realizados por el personal de seguridad y los propios
responsables del museo.
El misterio sigue abierto y no sabemos si pronto o tarde se
encontrará alguna explicación...