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viernes, 13 de marzo de 2015

Viernes 13. Relidad, mitos y leyendas...



Un día como el de hoy, viernes 13, no podíamos dejar de hablar de eso, de lo que significa el hecho de que el día 13 sea viernes. ¿Por qué trae mala suerte?¿Por qué se cree que suele ser un mal día? ¿Dónde nacen todas esas supersticiones? ¿Es superstición...O realidad? Te lo cuento.

A pesar de que es una fecha como tantas otras en nuestro calendario, lo cierto es que cuando nos damos cuenta de que el día 13 coincide con el viernes, pase lo que pase en ese día, enseguida lo asociaremos a la mala suerte, pero no siempre fue así.

La leyenda de la mala suerte del viernes trece en la mayoría de culturas occidentales, al igual que en Grecia y en los países hispanohablantes ocurre con el martes 13, o con el viernes 17 en Italia, proviene del S. XIV (1307), pero de eso hablaremos ahora.

Antes de saber dónde comienza esta leyenda, primero vamos a ver el motivo por el que se asocia el número 13 a la mala suerte o lo oscuro.

A pesar de que no hay consenso sobre la realidad del hecho, lo cierto es que hay varias explicaciones que se puede decir que son las más seguidas o aceptadas: La primera de ellas proviene de la religión católica, durante la celebración de la última cena habían 13 personas, y el resultado sabemos todos cuál fue; Y la segunda de ellas es que en el Código de Hammurabi, el número 13 se omite de su lista; Otra es la que la Cábala afirma que son exactamente 13 los espíritus del mal; En el Apocalipsis, su capítulo 13 está dedicado al anticristo y la bestia; En  el Tarot hace referencia a la muerte...

Lo cierto es que se trata de una superstición muy arraigada a nuestra cultura y unida de manera casi inseparable a la religión. Pero estas creencias en ocasiones han derivado en enfermedades, como la triscadefobia, que se trata de la enfermedad que padecen las personas que sienten fobia al número 13.

A pesar de lo lejos que no parece, en la vida cotidiana la superstición alrededor de este número es mucho mayor de lo que parece, ya que por ejemplo en la Fórmula 1, ningún corredor porta el número 13, o algunos portales o porterías en donde se omite el piso número 13, e incluso en la misma capital de España, en Madrid, no existe la línea de autobús número 13. En Francia ninguna de sus calles tiene el número 13, en Italia, la lotería nacional lo omite, las líneas internacionales de avión omiten este número en sus asientos y en Estados Unidos, en sus rascacielos no existe el piso número 13. Esto demuestra que el temor a este número no es tan lejano como nos parece...

Ahora que conocemos todo lo que hay detrás del número, vamos a tratar de entender de donde nace la leyenda del viernes 13.

Antes de la era cristiana, afirman las leyendas nórdicas, en una de las primeras referencias al mal augurio provocado por el número 13, que todo se debía a un banquete al que fueron invitados doce dioses, y Lohki, Dios de la pelea, la mentira y el mal, que no había sido invitado, se presentó en la cena sin invitación, por lo que el número de comensales ya era 13. Se cuenta que Loki durante la cena convenció al hermano de Balder, Hod, quien incitado por Loki le lanzó un muérdago a Balder que le cayó justo en el pecho. El incidente terminó con la muerte de Balder, Dios de la luz, la energía y la reconciliación.

Se dice desde entonces que si 13 comensales se sientan en una mesa, uno de ellos morirá...¿Recuerdan la última cena?.

Avanzando ya a la época cristiana, a principio del SXIV, en 1307, el viernes 13 de octubre de ese año, comenzó la persecución contra los Templarios por parte de la Santa Inquisición. Se produjeron arrestos masivos durante esa noche en Francia, sobre todo en París. El motivo fue que se aseguraba que los miembros de esa Orden se reunirían ese día para hacer celebraciones paganas y practicar herejías.

Esa fue la razón y motivo para el asesinato y su condena a la hoguera de todos los miembros de la Orden y aquellos con una afinidad sospechosa hacia la misma. Muchos de los Caballeros pudieron salvarse huyendo, lo que ha generado múltiples leyendas de las que otro día hablaremos, pero lo que importa es que desde aquel 13 de octubre de 1307, la leyenda sobre ese día estaba escrita para siempre.

Mucho más tarde, ya en el S.XVIII, la marina británica trató de eliminar todo tipo de supersticiones relativas al viernes 13,  y mandó llamar a uno de sus buques, que por cierto ya tenía nombre y se lo cambiaron, HMS Friday , se nombró como Comandante del buque a Jim Friday, se reclutó a su tripulación un viernes, la quilla del barco se armó un viernes y fue también un viernes 13 cuando se botó la nave... Jamás se volvió a saber de ese barco o de su tripulación.

Con todo lo dicho... Feliz Viernes 13.


Hasta mañana... o no.